Castellfollit de la Roca

CASTELLFOLLIT DE LA ROCA

Nuestro origen y lugar de residencia influye en nuestra forma de ser y nos imprime caracter, tal vez por ello, me gustan las cosas sencillas y sin demasiadas florituras, sentarme y ver pasar el mundo ante mi cámara es un gran placer para mi. Dejar pasar el tiempo, aprender de lo cotidiano, inmortalizar  lo efímero, plasmar lo que me gusta, o me disgusta, las alegrias y las tristezas, eso es lo que pretendo y deseo mostraros en este blog, espero que al igual que a mi no os deje indiferentes.

 

CASTELLFOLLIT DE LA ROCA

Asentado sobre un riscal basáltico es uno de los pueblos más pequeños de España, esta situado dentro del Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa.

 

De dia o de noche, es una gozada la contemplación del pueblo desde la pasarela que cruza el rio.

En invierno, como en el resto del año, tambien tiene su encanto.

 Panorámica visible desde la carretera de acceso al pueblo.

Imagen tomada durante las levantadas de primavera.

Algunas de las casa tienen sus terrazas colgadas al precipicio.

 Imagen de la  antigua entrada al castillo y al barrio mediaval del pueblo.

Plaza Josep Plà, con la antigua iglesia hoy convertida en museo.

Es un placer desde la plaza Josep Pla, poder contemplar la privilegiada panorámica al valle del Fluviá o subirse a lo alto de la torre de la antigua iglesia para experimentar una sensación aún más extrema.

Rincones pintorescos no faltan en Castellfollit. 

Celebrando la entrada de un Nuevo Año junto al campanario del reloj.

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Castell de Requesens

En el Alto Ampurdán, muy cerca de la frontera con Francia, situado sobre un pequeño montículo, dominando todos los valles del Puig Nuelós y a unos 7 Km. del pueblo de Cantallops,  podemos contemplar y visitar este impresionante y desconocido castillo.  
El castillo de Requesens.

 

 

Generalmente cuando se habla de un castillo, vienen a la cabeza un sinfín de imaginarias batallas, gestas heroicas y luchas a golpes de espada. Se ha escrito sobre la guerra de Requesens, pero no se conoce ningún suceso sanguinario que dé constancia de los hechos, lo que induce a pensar que de lo que llamamos guerra, no hubo ninguna.

  

Al no tener constancia de ningún hecho de guerra, al Castillo de Requesens se le desconoce su procedencia, cuál fue su origen y a quien se debe su construcción.

                                                                                                                                                                       La primera referencia sobre el lugar es en el año 859 y no lo hace como castillo, sino de "villare". Humfrido (probablemente de origen godo), hace donación a Oriol y aparentemente esto nos lleva a pensar que fueron ellos los fundadores. No obstante, también algunas referencias históricas, nos hacen creer que los fundadores fueran los Condes del Rosellón.
 

 

Los Condes del Rosellón, figuran de forma destacada entre gran cantidad de nombres y personajes, una mezcla de todo, sin que se llegue a comprender que atraía al lugar a tanta nobleza.

Todo ello iba sucediendo en los alrededores del siglo Xll, en tiempos de las Cruzadas que pretendían conquistar Tierra Santa, o cuando los cátaros mantenían firmes sus posiciones en Occitánia, Rosellón y Pirineos.

 

Entonces los Montes Alberes, no delimitaban dos Estados. La influencia de los Reyes Catalanes arribaba a toda la tierra del Lengua de Oc, así es a toda Occitánia.

La personalidad catalana se extinguió el 9 de Septiembre de 1213 cuando el Rey catalán Pedro el Católico, padre de Jaime l, muere en la batalla de Muret, cuando acudía en ayuda de los Condes de Tolosa, en lucha contra los mercenarios de Simón de Montfort.

Requesens probablemente era una vía de comunicación para pasar de los llanos del Rosellón a los llanos del Ampurdán, pasando por la Albera y el Puignuelós.

En el año 1040, lo conocemos como Recosin.

En el año 1085, Rechodindus.

En 1278, pasó a ser Requeseno.

De este modo poco a poco fue transformándose hasta llamarse Requesens, que es como lo conocemos actualmente. 



En el siglo Xll, seguía en posesión de los Condes del Rosellón.

Detalle de forja en las rejas

En 1285, empieza a figurar el nombre de Conde de Rocaberti. En 1420 el rey Alfonso V, hace donación a Dalmacio de Rocaberti, de los lugares de Verges, La Tallada; Vinça del Rosellón y el Castillo de Requesens.

 
La personalidad de los Condes del Rosellón, queda eclipsada por los Rocaberti, feudaros de la montaña de Requesens, su castillo, las masias y el lugarejo de Santa Maria, del año 844 y por tanto anterior al castillo.

Caldera calefacción

Hasta aquí se llegaban los ampurdaneses en demanda de la purificadora tramontana, cada año en la primera semana de Junio, salian en romería de la iglesia de Sant Sebastián.

Los Rocaberti, son tambien Condes de Perelada, durando su feudo cinco siglos.

A finales del siglo XVIII, Tomàs de Rocaberti de Dameto, conde de Perelada y Vizconde de Rocaberti, comenzó la restauración del castillo, muriendo en el año 1989 sin ver acabada la obra.

Un año más tarde, su hermana Joana Adelaida de Rocaberti, heredera de todos los bienes de su hermano, finalizó la restauración.

 


















Según parece, en aquel tiempo, las mujeres tambien tenian bien guardados sus secretos. Solo ella sabe y conocía el motivo por el que se desprendió de esta herencia, nombrando heredero de todos sus bienes al mallorquín Ferràn Truyols Despuig, Marqus de la Torre.

Ciertamente Ferràn no sabía que hacer con la monumental herencia y la vendió inmediatamente a sus hermanos Pere y Joan Roselló (mallorquines), que inician una brutal explotación de los bosques de la zona, talando arboles milenários. Una explotación forestal sin ningún control y que se alargó por veinte años.

Entre los años 1920-1922, acabada la explotación  del lugar, los hermanos Roselló venden la montaña al Duque del Infantado. Este despidió, (expropió) a los cerca de ochenta habitantes de Requesens, arrendatarios,  aparceros y otros, indicándoles que no esperaran indemnización ni ayuda por las casas.

En el año 1942 el Duque del Infantado, vende la montaña de Requesens a la Sociedad A. Bores, quien vuelve a venderla esta vez a Esteva y Pijoan, actuales propietarios.

Mosaicos con el escudo de los Rocaberti.

En acabada la Guerra Civil, una compañia de jovenes son destinados para hacer guardias en la montaña frontera con Francia, ocupando el castillo como cuartel; ignorantes del valor histórico del lugar, con piedras milenarias; destruyen los interiores y  las almenas de las torres.

El castillo volvio al estado ruinoso de un siglo atrás, tal como podemos contemplarlo en la actualidad.

(Resumen basado en el folleto explicativo que se entrega con la entrada al castillo. Precio: 2 €.)

 

Interior iglesia

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